Cambiado el: 21/05/2024
Todo lo que necesitas saber sobre los cigarrillos electrónicos sin botón
¿Alguna vez has oído hablar de los cigarrillos electrónicos automáticos?
A menudo se consideran los modelos más adecuados para los vapeadores novatos, especialmente para aquellos que aman la practicidad y la comodidad. Y si estás pensando en dejar de fumar sustituyendo los cigarrillos electrónicos a los cigarrillos tradicionales, puede que te hayas decidido a comprar uno de estos aparatos.
¿Es eso así?
Si estas son tus intenciones, antes de tomar una decisión final, te invito a leer el siguiente artículo en el que te explicaré cómo funcionan los cigarrillos electrónicos automáticos y qué aspectos debes tener en cuenta antes de comprar uno.
¿Cómo funcionan los cigarrillos electrónicos automáticos?
Por regla general, los cigarrillos electrónicos se activan a través de un botón especial incluido en la batería o en el box mod: cuando se presiona, el dispositivo entrega energía que calienta la resistencia y vaporiza el líquido del e-cig.
El cigarrillo electrónico automático, en cambio, no tiene este botón, sino que se activa automáticamente cuando el vapeador se lo lleva a la boca y aspira de la boquilla.
Este mecanismo de encendido está integrado en varios dispositivos, entre ellos:
- modelos totalmente desechables que incluyen unos pocos ml de líquido para cigarrillos electrónicos. Una vez que se agota este último, el e-cig ya no se puede usar, pero debe desecharse correctamente de acuerdo con las normas locales que rigen la recolección por separado;
- pod mods, es decir, modelos equipados con un cartucho desechable que, una vez agotado, debe ser reemplazado por uno nuevo. La batería suministrada, por otro lado, se puede reutilizar varias veces;
- dispositivos equipados con un atomizador. Sin embargo, cabe señalar que en estos últimos muy pocas veces se aplica la activación automática y que, en la mayoría de los casos, está integrada en modelos portátiles y con baterías pequeñas.
Lee también: Los pros y los contras del cigarrillo electrónico
Cigarrillos electrónicos automáticos: ¿los mejores dispositivos para quienes comienzan a vapear?
La principal ventaja de los cigarrillos electrónicos automáticos es la comodidad: gracias a su particular sistema de activación, vapear se convierte en un gesto más natural. Desde este punto de vista, también podemos decir que estos dispositivos reproducen más fielmente los gestos típicos de los fumadores.
Pensemos en este aspecto.
Cuando un fumador se lleva el cigarro a la boca para darle una calada, obviamente no tiene que apretar ningún botón: simplemente inhala. Como resultado, los modelos de cigarrillos electrónicos que se activan automáticamente se perciben más similares a los cigarrillos que los que tienen un botón.
Lo mismo puede decirse de sus características físicas: dado que los cigarrillos electrónicos automáticos suelen ser ligeros, estrechos y de forma alargada, se parecen más a los cigarrillos que modelos más avanzados como los box mods.
Por estas razones, los dispositivos de vapeo sin botones de activación están teniendo un éxito considerable entre los vapeadores novatos que buscan una solución práctica y fácil de usar.
Por qué deberías preferir los modelos tradicionales a los automáticos
En base a lo explicado en el párrafo anterior, podrías pensar que el cigarrillo electrónico automático es la mejor alternativa para aquellos que quieren iniciarse en el vapeo.
Sin embargo, me gustaría razonar contigo sobre un aspecto en particular.
Cualquiera que decida dejar de fumar pasándose al cigarrillo electrónico se encuentra en una situación delicada: el riesgo de volver a los cigarrillos es muy real y es crucial encontrar rápidamente un e-líquido que se adapte a tus gustos para no volver a caer en el habito. De lo contrario, de hecho, la insatisfacción podría empujar al fumador a volver a fumar.
Desafortunadamente, no es fácil encontrar el líquido más adecuado de inmediato: a menudo es necesario experimentar con varios antes de identificar el ideal.
“Ok, pero ¿qué tiene que ver todo esto con los cigarrillos electrónicos automáticos?”.
Si tiene a que ver.
Como te expliqué anteriormente, en la mayoría de los casos los modelos de cigarrillos electrónicos automáticos son mods desechables o pods, dos tipos que no ofrecen una amplia variedad de sabores líquidos. Es un defecto típico de todos los dispositivos que funcionan con cartuchos precargados.
Por el contrario, un cigarrillo electrónico tradicional equipado con un atomizador ofrece la posibilidad de vapear cualquier tipo de líquido del mercado, incluidos los caseros. Claro, aprender a usarlos es un poco más complicado que los que no tienen botones, pero es un pequeño precio que pagar para reducir el riesgo de volver a fumar y hacerse daño con los cigarrillos, ¿no crees?
Lee también: Cigarrillo electrónico que ya no tira: cómo solucionarlo
En conclusión
En este artículo hemos explicado cómo funcionan los cigarrillos electrónicos automáticos y cuáles son los pros y los contras de estos dispositivos.
Suelen considerarse como la mejor alternativa para aquellos que acaban de empezar a vapear y buscan un modelo fácil de usar y similar a los cigarrillos tradicionales. Y, en algunos casos, ¡realmente pueden ser la opción ideal!
A menudo, sin embargo, estos dispositivos aumentan el riesgo de que quienes los usan encuentren el vape insatisfactorio y vuelvan a coger los rubios en sus manos.
Por eso, recomendamos a todos los fumadores que deseen dejar de fumar de una vez por todas que compren un cigarrillo electrónico equipado con un atomizador, para aumentar drásticamente las posibilidades de encontrar un líquido satisfactorio y desterrar para siempre la tentación de volver a fumar.
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